Este tercer cómic traducido en España de Manuele Fior, después de La señorita Else (adaptación de una novela de Arthur Schnitzler) y Cinco mil kilómetros por segundo (mejor álbum del festival de Angulema en 2011), vuelve a acertar en su lenguaje visual.
Abandona el color y adopta un trazo que a veces me recuerda a Picasso en el diseño y en las expresiones de los personajes. Juega con los negros y los grises, con las siluetas. Hace algunos experimentos bastante interesantes que realmente enriquecen su trabajo.
Sigue recurriendo a la elipsis para relatarnos la historia, esta vez ubicada en un futuro cercano, 2048, donde un psicólogo en la cuarentena busca rehacer su vida. Aunque gráficamente me ha gustado más que Cinco mil, la historia tiene un final demasiado raro y demasiado brusco para mi gusto.
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