Uno espera ver una peli chorra pero se encuentra con algo peor, una peli de mierda. No sirve ni para pasar el rato. Uno esperaba algo de humor, pero no. La peli tiene los santos redaños de tomarse en serio. Y es inquietante cómo el protagonista parece un jovencito Liam Neeson.
La película forma ya parte de la nueva generación de pelis malas: un argumento infantiloide y sin ningún sentido llena de planos especiales para el 3D donde se ve claramente que todo está hecho por ordenador y para subnormales, y que aún así pretende parecer digna.
Creo que vimos diez o quince minutos.
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