He estado buscando reseñas de otros cómics de Jason y me encontré esta entrada de 2012 sobre ¿Por qué haces esto? que más parece un tuit que una crítica, y que resulta cero informativa. Otra más extensa, y que contextualiza mejor al autor y su obra, es un artículo sobre No me dejes nunca que publiqué en 2008 para la revista digital Espacio Luke bajo el título "El retorno de Jason".
Al igual que apuntaba en el artículo, sigo pensando que las mejores obras que he leído del autor son ¡Chhht! y Espera..., dos que inexplicablemente para mí no aparecen en el catálogo de Astiberri. Aquellas dos resultaron impactantes gráficamente y emocionalmente. Su acercamiento intimista a ciertas situaciones muy duras, sobre todo en Espera..., me dejó desarmado.
Ambos tomos los he leído pero les he perdido la pista. Es posible que los leyera en la biblioteca. Los recuerdo con nostalgia porque ninguna de las traducciones posteriores me han resultado tan significativas. Más bien, todo lo contrario. Las he digerido como historias tontas, sin sustancia, con unas notas de ciencia ficción que desbaratan el efecto conmovedor.
Un noruego en el Camino de Santiago es el diario de viaje viñetado de Jason explicado con una sosez insuperable. Dos detalles podrían haberlo salvado: el dibujo y la reflexión. Pero ni su estilo alcanza para ilustrar hermosos paisajes como Jiro Taniguchi, ni hay ningún mensaje original o rescatable de esta experiencia personal que no tiene eco más allá de sí misma.
Tiene toques de humor, pinceladas, pero no sirvieron para invitarme a rescatarlo. Jason desmitifica el Camino, como no podría ser de otra manera. No lo degrada, pero se encuentra al margen de la idea mística que tienen muchos peregrinos. Él lo resume con el chiste: "Cumplí los cincuenta años. Era esto o comprarme un porsche".
No hay revelación divina, no hay mejora. Hay un gusto por el excursionismo y un reto: intentar entablar conversar con la gente, abrirse más, salir de su hermetismo. Pero no hay una mejora espectacular, hay un avance realista; unos pasos hacia adelante que, sin embargo, no repercuten en la gran moraleja.
Desde luego, no esperaba algo así de él. Lo único que deseaba es que no me dejara indiferente como sucedió con Yo maté a Adolf Hitler o El último mosquetero, tras los cuales lo abandoné. Este lo compró mi pareja y le resultó muy divertido. El humor seco de los nórdicos parece que le encanta. Para mí no justificó el tiempo dedicado. Lo términé con esfuerzo, con desgana y aburrido.
PD: Me apuntan en comentarios que ¡Chhht! y Espera... fueron reeditados conjuntamente en el volumen titulado Un paso en falso. Muchas gracias a El Convincente Gon por el aviso.
2 comentarios
Jason no ha vuelto a hacer nada tan bueno como "Espera..." (uno de mis cómics favoritos de todos los tiempos). El de Hitler y "No me dejes nunca" no están mal pero es cierto que en la mayoría de sus obras Jason abusa del refrito de géneros y resulta bastante intrascendente.
Por cierto, Astiberri sí que tiene "Chhht" y "Espera..." en su catálogo. Los recopilaron en un único volumen que se llama "Un paso en falso".
¡Oh, genial, lo añado a la reseña! No entiendo por qué decidieron reeditarlos juntos, con ese título y esa portada que es mucho más fea que la de los tomos originales por separado. En fin, igualmente, ¡muchas gracias!
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