Zipi y Zape y el club de la canica

Como Dog Pound, se trata de una peli de niños en un correccional... pero con otro rollo.

Esta aventura infantil con actores que lo hacen fatal (en la línea de la nueva hornada de intérpretes españoles) y hablan como poligoneros (ídem) ha conseguido adaptar de manera muy hábil el cómic de Escobar a la actualidad.

Con la excusa de que el centro de "reeducación" utiliza métodos más propio de otro régimen, consiguen mezclar ambas épocas. Visualmente, está muy bien, y los efectos especiales no tienen nada que envidiar a otras superproducciones.

No sé si a los fans de la serie original les parecerá que desvirtúa la esencia de la historieta. Como a mí nunca me gustaron y siempre compré Mortadelo, debo decir que es recomendable siempre y cuando no seas de esos padres que no quieran que tus hijos oigan varias veces la palabra "gilipollez".