El amante doble (L'amant double, 2017)
¡Qué diferente de En la casa (Dans la maison, 2013)! Aquella película me fascinó y esta me aburrió. El amante doble va de, ¡sorpresa!, dobles, gemelos, y no hay ni una idea original, todo son lugares comunes y manidos. Se adivina el final, y tras el final la consecuencia vista en otras películas. Mucho ver a Marine Vacth desnuda, pero poca chicha, por no decir ninguna.
28 semanas después
(28 weeks later, 2007)
Cinco años después de 28 días después, volvieron con esta secuela dirigida por Juan Carlos Fresnadillo en lugar de Danny Boyle. Esta es más convencional, menos punky que su predecesora. Tiene un arranque espectacular, frenético, pero se desinfla hasta convertirse en otra peli más de zombis con un enfrentamiento cutre y absurdo contra el malo maloso que no muere nunca.
La cosa (The thing, 1982)
La vi en la filmoteca de Barcelona. No soy fan del terror y esta obra de John Carpenter no me hizo cambiar de opinión. Sin embargo, confieso que la veía y le encontraba algo original en el diseño asqueroso, cutre y feísta de "la cosa". Me entretuvo, pero no dejó de parecerme una chorrada monumental con momentos ridículos en los que la sala llegó a estallar en carcajadas.
En busca de Bobby Fischer
(Searching for Bobby Fischer, 1993)
¡Qué ñoñez! El cinismo de hoy en día no la permitiría. Menos aún se aceptaría ese personaje de negro pobre pero bueno con el chico blanquito. Gazmoña en sus diálogos y en sus actuaciones, con un chaval forzadamente "acucado", con sus zapatillotas grandes y sus ojitos azules de cachorrito abandonado, ha envejecido muy mal. Me resultó soporífera.
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