Tenemos que hablar de Kevin
(We Need to Talk About Kevin, 2011)
Basada en la novela de Lionel Shriver, esta película disecciona la relación enfermiza de una madre sometida a un hijo cruel y diabólico. Verla provoca malestar y terror. Tilda Swinton encabeza de modo impecable el descenso a los infiernos de una familia en esta obra magistral.
(In the loop, 2009)
Es una de las comedias políticas británicas más corrosivas y alabadas por la crítica. Llevó a las salas de cine la serie televisiva homónima que, más tarde, se haría internacional con su versión estadounidense, Veep. Me propuse verla en V.O.S.E. y fui incapaz de seguirla, entenderla o reírme.
Canino (Kynodontas, 2009)
Esta tragicomedia repleta de humor negro retrata la turbadora cotidianeidad de una estrambótica familia griega. Divida en fragmentos que poco a poco empiezan a cobrar sentido, es una maravilla que no deja indiferente ni las emociones ni el pensamiento. Todo un shock.
Moonlight (2016)
No era el guión que me imaginaba. Trata temas como los suburbios, la drogadicción y el rol de la masculinidad en la comunidad afroamericana. Artísticamente no se queda atrás, y sabe jugar con la fotografía y la música. Es una buena película con buenas actuaciones, pero esperaba algo distinto.
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