Este año no he seguido ni Spotify ni Amazon Prime Music. Me he hartado de escuchar 50 canciones relajantes en el tren para poder huir de la experiencia cada vez más horrorosa de utilizar diariamente Renfe para ir al trabajo. Me ha costado realizar el listado, pues mucho de lo escuchado ha sido a través de Youtube, y recorrer su historial no es tarea menor.
No es un revival per se, ya que no he dejado de escuchar el álbum desde que salió hace dos años el videoclip de I'm The One (que, vuelto a ver, es bastante cutre y horterilla). Lo escuchaba a través del servicio de Amazon porque me parecía caro, pero estas Navidades me lo regalaron. Mi adicción sigue como el primer día con Nobody, On Everything o Down for Life.
Junto con el recopilatorio de música relajante, esto es lo que más he escuchado este 2019 para abstraerme en el trabajo. La radio de Hip Hop Lo-Fi del canal ChilledCow en YouTube me genera una paz a años luz de cualquier chute de Valeriana. Es perfecto para aislarte del entorno mientras te dedicas a picar letras hasta el fin de tu existencia.
También he pulsado el play de videoclips que siempre me vuelve a apetecer oír: Nuse, Chemtrails y Laberinto de Amor de Pimp Flaco y Kinder Malo (me parto con los nombres); De Pie y Un Veneno de C. Tangana; o Latinoamericana de Maikel Delacalle. Por supuesto, tampoco ha faltado el "eterno retorno" al funky brasileño y al dancehall jamaicano.
El single F*cking Money Man se compone de Milionària y Dio$ No$ Libre del Dinero. La segunda parte continua con el estilo aflamencado que la catapultó, pero es la primera, una rumba catalana en catalán, la que me vuelve loco, muy divertida y pegadiza. De sus otros temas, Barefoot In The Park y Yo x Ti, Tu x Mi no me desagradan, Con altura y Aute Cuture me cansan y A palé... ni idea.
Hasta ahora, había pasado siempre por caja y no me habían defraudado. Es cierto que Atletes, baixin de l'escenari y Jo competeixo me costaron al principio, pero luego los he escuchado en bucle. Aunque el tema principal captó mi atención, el resto de Per la bona gent me parece irregular. Los arreglos electrónicos no me convencen y la letra por momentos no se entiende. No he vuelto a él.
Billie Eilish me retrotrae a mi música de adolescencia. Son los cantos al hastío y suicidio que tan atractivos resultan en una etpa en la que, realmente, no estamos tan mal. Pese a la edad que gasto ya, su suave y deprimente voz me ha atrapado ya con Copycat, Idontwannabeyouanymore, Bad guy, Xanny o All the good girls go to hell.
Del popurrí que he consumido en la red de Google:
REVIVAL
Grateful (2017) de DJ Khaled
No es un revival per se, ya que no he dejado de escuchar el álbum desde que salió hace dos años el videoclip de I'm The One (que, vuelto a ver, es bastante cutre y horterilla). Lo escuchaba a través del servicio de Amazon porque me parecía caro, pero estas Navidades me lo regalaron. Mi adicción sigue como el primer día con Nobody, On Everything o Down for Life.
Lo-Fi Hip Hop radio de ChilledCow
Junto con el recopilatorio de música relajante, esto es lo que más he escuchado este 2019 para abstraerme en el trabajo. La radio de Hip Hop Lo-Fi del canal ChilledCow en YouTube me genera una paz a años luz de cualquier chute de Valeriana. Es perfecto para aislarte del entorno mientras te dedicas a picar letras hasta el fin de tu existencia.
También he pulsado el play de videoclips que siempre me vuelve a apetecer oír: Nuse, Chemtrails y Laberinto de Amor de Pimp Flaco y Kinder Malo (me parto con los nombres); De Pie y Un Veneno de C. Tangana; o Latinoamericana de Maikel Delacalle. Por supuesto, tampoco ha faltado el "eterno retorno" al funky brasileño y al dancehall jamaicano.
"NOVEDADES"
Milionària (2019) de Rosalía
El single F*cking Money Man se compone de Milionària y Dio$ No$ Libre del Dinero. La segunda parte continua con el estilo aflamencado que la catapultó, pero es la primera, una rumba catalana en catalán, la que me vuelve loco, muy divertida y pegadiza. De sus otros temas, Barefoot In The Park y Yo x Ti, Tu x Mi no me desagradan, Con altura y Aute Cuture me cansan y A palé... ni idea.
Per la bona gent (2019) de Manel
Hasta ahora, había pasado siempre por caja y no me habían defraudado. Es cierto que Atletes, baixin de l'escenari y Jo competeixo me costaron al principio, pero luego los he escuchado en bucle. Aunque el tema principal captó mi atención, el resto de Per la bona gent me parece irregular. Los arreglos electrónicos no me convencen y la letra por momentos no se entiende. No he vuelto a él.
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Don't Smile at Me (2017) y
When We All Fall Asleep, Where Do We Go? (2019) de Billie Eilish
When We All Fall Asleep, Where Do We Go? (2019) de Billie Eilish
Billie Eilish me retrotrae a mi música de adolescencia. Son los cantos al hastío y suicidio que tan atractivos resultan en una etpa en la que, realmente, no estamos tan mal. Pese a la edad que gasto ya, su suave y deprimente voz me ha atrapado ya con Copycat, Idontwannabeyouanymore, Bad guy, Xanny o All the good girls go to hell.
Del popurrí que he consumido en la red de Google:
- Rap Bruto, Residente & Nach
- Afilando los Cuchillos, Residente, iLe & Bad Bunny
- Bellacoso, Residente & Bad Bunny
- Cántalo, Ricky Martin, Residente, Bad Bunny
- Para repartir, C. Tangana, Alizzz
- Avisado, Morad
- Il est où?, L'Algérino
- Autestima, Cupido, Lola Indigo, Alizzz
- DOTA, Basshunter (Ricardo Milos edition)
- U got that, Halogen
- Ànima, Joan Dausà
- Getsemaní, Camilo Sesto (Live 1977)
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