Una señor se acerca al librero.
–Hola, ¿en qué puedo ayudarle?
–Busco libros de tecnología de la gastronomía.
–¿De... tecnología de la gastronomía? ¿A qué se refiere exactamente?
El cliente se queda extrañado, sorprendido de que el librero no le entienda.
–Pues de tecnología... de la gastronomía –es su explicación y respuesta.
–¿Pero se está refieriendo a los utensilios, a las ollas, a los fogones,...?
–Tecnología de la gastronomía... lo que viene siendo la base.
«¿La base de qué?».
–Hola, ¿en qué puedo ayudarle?
–Busco libros de tecnología de la gastronomía.
–¿De... tecnología de la gastronomía? ¿A qué se refiere exactamente?
El cliente se queda extrañado, sorprendido de que el librero no le entienda.
–Pues de tecnología... de la gastronomía –es su explicación y respuesta.
–¿Pero se está refieriendo a los utensilios, a las ollas, a los fogones,...?
–Tecnología de la gastronomía... lo que viene siendo la base.
«¿La base de qué?».
2 comentarios
pues está claro, la subficie. las moléculas.. si es que...
Jajaja
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