Luis Piedrahita, el genial monologuista, es una mierda cuando se trata de escribir un guión y dirigir. La idea inicial es buena: encerrar a los mejores matemáticos a resolver sesudos enigmas lógicos en una habitación que va encogiendo y amenaza con aplastarles si no los resuelven todos antes del tiempo indicado.
El problema viene cuando los cuatro matemáticos en realidad son más tontos que una alpargata (y a algunos, como Alejo Sauras, no les hace falta interpretar demasiado) y los enigmas son acertijos de escuela del tipo: "Si un gallo pone un huevo en un tejado, ¿hacia donde caerá el huevo?". Más adivinanzas, aquí: http://acertijos.elhuevodechocolate.com/de1a12/acertijo1.htm
Es muy ridícula. Ni Federico Luppi ni Lluís Homar dan dignidad a este truño que, desgraciadamente, es de los que acaba definiendo ese concepto de "cine español".
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