Vascongadas: Fe de etarras y La pequeña Suiza

Fe de etarras (2017)

Sentía curiosidad por este título. ¿Cómo manejar una comedia sobre ETA, sobre unos terroristas que piensan llevar a cabo un atentado para desestabilizar el proceso de paz? No es el humor de Vaya Semanita, no es una sucesión de gracias. La historia de los cuatro personajes está muy bien tejida y cada uno de ellos tiene un matiz que lo hace interesante.

Javier Cámara está inconmensurable. Se mueve de un tono ridículo y cómico a otro totalmente serio en un parpadeo. Ramón Barea da directamente miedo. En ningún momento se banaliza el conflicto vasco. Consiguen las risas a través de la situación patética de estos "luchadores por la liberación de Euskal Herria" que deben traicionar sus principios para alcanzar su letal objetivo.

La pequeña Suiza (2019)

También con el tema nacionalista de fondo, esta película habla de un pueblo ficticio perteneciente a Castilla pero situado en territorio vasco, acaso trasunto del Condado de Treviño, donde hallan los restos de un familiar de Guillermo Tell. Con la tumba como excusa, y viendo que en Euskal Herria no están por la labor de anexionarlos, deciden que abandonarán España uniéndose a Suiza.

Comparada con la anterior, esta es la cara oculta de la luna: aquí nunca brilla la más mínima luz de ingenio. Tosca, con interpretaciones pésimas (reseñablemente infumables las de sus protagonistas), es digna de la parrilla de Telecinco. Cuando uno piensa que no puede empeorar, reanuda su rápel extremo hacia el abismo. ¡Hasta los créditos finales dan vergüenza ajena!