Entre la razón y la locura
(The Professor and the Madman, 2019)
La página principal de Amazon Prime Video me resulta más útil que, por ejemplo, la de Netflix, que es caos. Entre sus virtudes, tiene una sección de títulos que van a retirar. De vez en cuando la reviso por si hubiera algo que pudiera interesarme. En ella me encontré Entre las que razón y la locura, una película de la que no tenía ninguna pista pese a estar protagonizada por Mel Gibson y Sean Penn.
Este drama biográfico habla de algo, en principio, tan poco emocionante como la creación de un diccionario, en su momento titulado The New English Dictionary on Historical Principles y conocido actualmente como Oxford English Dictionary. Es 1878, y el proyecto está estancado dada la ingente cantidad de investigación necesaria, inasumible para un reducido equipo de estudiosos.
Lo que pudiera haberse convertido en un callejón sin salida encuentra una vía de escape gracias al lexicógrafo James Murray (Mel Gibson), quien propone implicar a la ciudadanía en la tarea de investigación. Convertido en el editor principal del proyecto, el filólogo escocés hace un llamamiento público a los lectores en inglés para que documenten la aparición de las palabras.
Entre los colaboradores más prolíficos se encuentra William Chester Minor, un cirujano retirado del ejército de los Estados Unidos. Su situación es peculiar, pues escribe de el asilo para enfermos mentales de Broadmoor, Inglaterra, donde se encuentra recluido tras matar a un hombre en lo que parece que fue un brote de esquizofrenia.
A través de estos dos hombres se establece un estrecho vínculo. La película ensalza esta amistad mientras muestra la situación de la viuda de la víctima del cirujano, quien termina visitando a Minor en el hospital para poder enfrentar al asesino de su marido. Esta trama es la que más flojea, y busca ensalzar a W.C.Minor a costa de la mujer.
Tanto la ambientación como las interpretaciones me han cautivado. Tiene un corte teatral, muy clásico, en el sentido de que la nobleza y los valores de los personajes no tienen fisuras, nunca son puestas en duda. Pero como historia es tan sólida como conmovedora. Me sorprende no haber oído antes de ella, teniendo en cuenta la talla de las estrellas que la protagonizan.
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