Este peli interpretada por los primos Noruegos de Florentino Fernández, Steve Buscemi y Leticia Dolera no es tan mala como cabría esperar. Si hubiera sido estadounidense hubiera sido un truño típico. Al principio es asquerosa, luego cliché, después mejora bastante y finalmente descoloca (o coloca, pues alguien parece haber fumado algo).
Cuando mejora, parece que va a tomar otra dirección y, aunque se desvía de las fantasías made in USA para frikis adolescentes, me hubiera gustado que se hubiera alejado más del camino trillado de "bestia ama a bella". Estoy cansado de los personajes que exigen que se les acepte tal como son (hasta desaseados y enfermizos) pero luego no bajan su listón de las medidas 90-60-90.
Pese a todo, más realista y preocupada por hacer algún juego de cámara de lo que podría hacer una peli de Hollywood. El momento más extraño es cuando en mitad de esta historia noruega donde sorprendentemente el sol no deja de brillar, empieza a sonar Siempre me quedará de Bebe. (!!)
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