Se me ocurre, ahora, a bote pronto, que “a bote pronto” no tiene pies ni cabeza. Mucha gente lo decimos porque lo hemos oído. Oímos “pero, a bote pronto”. Bueno, o al menos eso pensamos oír. Porque habrá personas que cometan el error y habrá otras que no. Lo que sucede es que la lengua oral tiene lo que tiene. “A voz de pronto” puede sonar muy parecido si se pronuncia deprisa. “A vozde pronto”. “A vohdde pronto”. “A votte pronto”. “A bote pronto”.
La expresión tiene relación con expresiones del tipo “a voz de apellido” o “a voz en cuello”, aunque más actual podría ser una del tipo “A la voz de ya”. En cambio, con “bote” no existen tales construcciones, sea cual sea su significado. Así pues, se puede comprobar como la lengua va sufriendo sus cambios, por deformación bocacional.
La expresión tiene relación con expresiones del tipo “a voz de apellido” o “a voz en cuello”, aunque más actual podría ser una del tipo “A la voz de ya”. En cambio, con “bote” no existen tales construcciones, sea cual sea su significado. Así pues, se puede comprobar como la lengua va sufriendo sus cambios, por deformación bocacional.
2 comentarios
Siento decir que toda esta explicaciøn es completamente flasa. : )
Flasa!!! A bote pronto, flasa me es!
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